La carrera espacial ha regresado con fuerza y esta vez los protagonistas son Estados Unidos y China. Ambas potencias han intensificado sus esfuerzos por conquistar el espacio, con ambiciosos programas que incluyen misiones a la Luna, Marte y más allá.
Esta nueva competencia, no solo se manifiesta en declaraciones de líderes y funcionarios, sino también en acciones concretas que evidencian la intensificación de los objetivos de ambas naciones.
En abril de 2024, Bill Nelson, administrador de la NASA, reconoció ante el Congreso de Estados Unidos que ambos países estaban “en efecto... en una carrera espacial”. Esta declaración puso de manifiesto la creciente tensión entre las dos potencias en el ámbito espacial.
La Luna: Objetivo estratégico para EU y China
La exploración lunar se ha convertido en el epicentro de esta nueva carrera espacial. La Luna es vista como un punto clave para futuros viajes a otros planetas, ya que la presencia de agua en el satélite natural de la Tierra permitiría obtener combustible para cohetes.
The rate gyro assembly that helps maintain station orientation has been replaced. @AstroHague will soon work on the NICER X-ray telescope while @Astro_Suni will replace navigation hardware. pic.twitter.com/EfqNDF8ZAI
— International Space Station (@Space_Station) January 16, 2025
“Mi preocupación es que ellos (China) lleguen al polo sur lunar primero y, luego digan: ‘Esta es nuestra zona, ustedes quédense fuera’”, declaró Nelson a los legisladores norteamericanos.
“El polo sur de la Luna es una parte importante... Creemos que allí hay agua y, si hay agua, entonces hay combustible para cohetes”, añadió.
Chang’E-6: Un hito para China
Las palabras de Nelson coincidieron con el lanzamiento de la misión lunar china Chang’E-6 en mayo de 2024. Esta misión alcanzó un hito histórico al recolectar muestras del lado oculto de la Luna y traerlas de vuelta a la Tierra.
Este logro demostró el avance significativo de China en la exploración espacial y reforzó su posición como un competidor clave en la carrera lunar.
There is certainly life on #Mars! We're the life of the party! #Zhurong #Tianwen1 #CNSA @CNSA_en pic.twitter.com/cC8pZVmyVt
— China National Space Administration (CNSA) (@CNSA_en) May 15, 2021
Artemis: El regreso de EE.UU. a la Luna
Estados Unidos, por su parte, ha apostado fuerte por el programa Artemis , que busca llevar astronautas a la Luna en 2025, incluyendo a la primera mujer y la primera persona de color en pisar la superficie lunar.
Artemis no se limita a un simple alunizaje, sino que busca establecer una presencia humana permanente en la Luna y desarrollar tecnologías que permitan futuras misiones a Marte.
La Estación Espacial Lunar Gateway, que orbitará la Luna, servirá como punto de escala para las misiones lunares y como plataforma de investigación.
Next stop? The Moon.
— NASA Artemis (@NASAArtemis) January 15, 2025
Following a spectacular launch, @Firefly_Space’s Blue Ghost lander will arrive at the Moon with 10 NASA payloads aboard on March 2. pic.twitter.com/vg6yO6P0KK
Más allá de la Luna: Marte y el espacio profundo
La competencia entre Estados Unidos y China no se limita a la Luna. Ambas naciones tienen la mira puesta en Marte y en la exploración del espacio profundo.
La NASA planea enviar astronautas a Marte en la década de 2030, mientras que China también ha expresado su interés en explorar el planeta rojo.
Además, ambos países están desarrollando telescopios espaciales de última generación para observar el universo con mayor precisión.
La rivalidad entre Estados Unidos y China está impulsando una nueva era de exploración espacial. Ambas potencias invierten grandes recursos en sus programas espaciales, lo que acelera el desarrollo de nuevas tecnologías y abre posibilidades sin precedentes para la humanidad.
México en la carrera espacial: Colaboración y desarrollo tecnológico
México, aunque no figura entre las potencias espaciales dominantes, tiene un rol importante que jugar en esta nueva era de exploración.
La Agencia Espacial Mexicana ( AEM ) ha establecido convenios de colaboración con agencias espaciales internacionales, incluyendo la NASA, para participar en proyectos de investigación y desarrollo tecnológico.
Uno de los ejemplos más destacados es la participación de México en el programa Artemis. Ingenieros mexicanos han colaborado en el diseño y construcción de componentes para la Estación Espacial Lunar Gateway.
A un año del proyecto “Colmena” de micro robots mexicanos que llegaron a la órbita lunar, informa @OnceNoticiasTV https://t.co/7TKBsR2sdT@UNAM_MX @icnunam @LINX_ICN_UNAM @gmtanco @NASA @Secihti_Mx @UPAEP
— AEM (@AEM_mx) January 14, 2025
México ante el desafío espacial: ¿Observador pasivo o actor protagónico?
La participación de México en la nueva carrera espacial plantea preguntas cruciales sobre su papel en el futuro de la exploración del cosmos.
¿Se conformará con ser un observador pasivo, limitándose a la colaboración en proyectos internacionales? ¿O asumirá un rol más protagónico, impulsando sus propias iniciativas y desarrollando tecnologías propias?
Si bien la colaboración con agencias como la NASA es valiosa, es fundamental que México no se limite a ser un simple proveedor de mano de obra calificada.
Es necesario que el país invierta en investigación y desarrollo, impulse la formación de científicos e ingenieros espaciales, y fomente la creación de empresas y startups en el sector aeroespacial.
La pregunta que queda en el aire es: ¿Estará México a la altura del desafío?