¿Me pueden demandar si difundo un video de un asalto o robo?
Grabar el rostro de los delincuentes y exhibirlo ha desatado polémica; por un lado, está la protección de datos personales y por el otro la presunción de inocencia.
La difusión de videos que captan delitos como asaltos o robos ha generado un intenso debate sobre su legalidad y las implicaciones éticas que conllevan. A medida que la tecnología avanza y las cámaras de seguridad se vuelven más comunes, surge la pregunta: ¿es un delito difundir estos videos? Fuerza Informativa Azteca (FIA) te explica los aspectos legales de este tema.
Los especialistas coinciden en que, en situaciones donde se documentan actos delictivos , la difusión de estos videos puede estar justificada. La Ley de Protección de Datos Personales permite la divulgación de imágenes en contextos de emergencia o interés público, como es el caso de un delito en flagrancia. Esto significa que si el video ayuda a evidenciar un crimen y a identificar a los delincuentes, su difusión podría considerarse legal.
Grabar el rostro de los delincuentes y exhibirlos ha generado polémica.
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) November 28, 2024
Por un lado la protección de datos personales y la presunción de inocencia; por otro, la necesidad de evidenciar a los delincuentes en flagrancia.@pacoguizar3 con los detalles en #HechosAM pic.twitter.com/xv5MNbuDXG
“Llegar a decir que nos pueden demandar por usar en estos contextos sería un tanto riesgoso porque la utilidad de la videograbación es clara. No pueden reclamar la aplicación de la ley en su beneficio cuando ellos mismos la están transgrediendo”, señaló el Doctor Diego García, especialista en datos personales en la Universidad Iberoamericana.
Presunción de inocencia y protección de datos se verían vulnerados
El dilema radica en equilibrar la necesidad de informar al público sobre delitos y proteger los derechos individuales. La presunción de inocencia es fundamental; difundir la imagen de un presunto delincuente antes de que haya una condena puede ser perjudicial y dar lugar a demandas por violación a la intimidad o daño al honor.
“Grábale, grábale”, así de descarado respondieron estos rateros, luego de quitarle los faros a un carro, y al darse cuenta que los estaban grabando.
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Ocurrió en la colonia #Narvarte.
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“Grabar con cámaras de vigilancia privada un altercado vial o bien el día a día de su vecina y luego difundirlo, eso sí podría originar una demanda, pues ahí se invade la privacidad”.
¿Cuáles son las consecuencias que podría tener grabar un acto delictivo?
Aunque viralizar un video delictivo no conlleva necesariamente responsabilidad penal, existen riesgos asociados. Si alguien graba un incidente del día a día sin relación con un delito y lo publica, podría enfrentar acciones legales por invasión a la privacidad. Por ejemplo, el día a día de una o un vecino.
La ley estipula que el uso indebido de imágenes personales puede resultar en multas significativas y hasta cinco años de prisión.
