Durante la madrugada de este viernes, el gobierno de El Salvador trasladó a los primeros 2 mil pandilleros a la mega cárcel recientemente inaugurada en el país y que está considerada como una de las más grandes de Latinoamérica.
Esto como un nuevo paso en una controvertida represión del crimen que ha provocado un aumento considerable en la población carcelaria de la nación centroamericana.
“Este será su nuevo hogar, donde no podrán hacer más daño a la población”, escribió en Twitter el presidente Nayib Bukele.
𝗨𝗡 𝗩𝗜𝗗𝗘𝗢 𝗘𝗦𝗖𝗔𝗟𝗢𝗙𝗥𝗜𝗔𝗡𝗧𝗘
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) February 24, 2023
Esta madrugada se realizó un operativo de #seguridad para trasladar a los primeros 2 mil #pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (#CECOT). https://t.co/MLSnyKG4Dw#GuerraContraPandillas pic.twitter.com/tmWsAv1V7w
Asimismo, el mandatario salvadoreño compartió un video del momento en que los pandilleros fueron trasladados a la nueva cárcel , la cual tiene capacidad para albergar a 40 mil presos.
En las imágenes se podía ver a los pandilleros vestidos con calzones blancos, esposados, con la cabeza rapada, corriendo por la nueva prisión para llegar a sus celdas. Muchos de los presos tenían tatuajes de de osos, un símbolo de las pandillas
Entre los presos recluidos en la nueva cárcel, destacan integrantes de conocidas pandillas que azotaron al país como la Mara Salvatrucha (MS-13) y su rival el Barrio, quienes estaban recluidos en el penal Izalco, ubicado a unos 65 kilómetros de la capital del país.
¿Qué pasa en El Salvador con los pandilleros?
El año pasado, el gobierno de El Salvador aprobó un estado de excepción, con el cual se suspenden los derechos constitucionales de los ciudadanos, lo que llevó a un aumento de detenciones de presuntos pandilleros.
Desde entonces, más de 64 mil sospechosos han sido arrestados en redadas contra el crimen. Los arrestos pueden realizarse sin una orden judicial, el gobierno puede acceder a las comunicaciones privadas y los detenidos ya no tienen derecho a un abogado.
Según cifras oficiales, el año pasado se redujeron los homicidios en un 57% y unos 64 mil supuestos pandilleros han sido detenidos durante el estado de emergencia, crítico por organizaciones de derechos humanos.
Las organizaciones de derechos humanos argumentan que personas inocentes se han visto involucradas en la política, incluidas al menos docenas que han muerto bajo custodia policial.