En un operativo conjunto de autoridades del estado de Puebla, se logró la captura de Reynaldo “N” y Humberta “N”, quienes enfrentan acusaciones por el delito de explotación laboral infantil en perjuicio de varios menores de edad. Las investigaciones señalan que, desde julio de 2020, los imputados presuntamente obligaban a niños y niñas a trabajar de manera extenuante durante jornadas de varios días seguidos, sin permitirles descanso ni proporcionarles alimentación adecuada.
La detención de la pareja se efectuó en el municipio de Chichiquila, Puebla, como resultado de un trabajo coordinado de inteligencia que permitió localizar su paradero. Reynaldo “N” y Humberta “N” se encontraban prófugos de la justicia desde hacía varios meses.
Sus inicios de explotación infantil habrían sido con niños de la CDMX
Las indagatorias ministeriales revelan que los hechos de explotación habrían comenzado en la Ciudad de México, donde los acusados mantenían a los menores en condiciones inhumanas. Los informes preliminares de la Fiscalía capitalina indican que las víctimas eran forzadas a realizar labores demandantes durante extensos periodos, sin la posibilidad de descansar, acceder a alimentos suficientes o contar con condiciones.
Una vez localizados, elementos de la Policía de Investigación (PDI) de la Ciudad de México, en colaboración con autoridades poblanas, llevaron a cabo la detención de la pareja sin el uso de violencia ni afectación a terceros. Tras su aprehensión, Reynaldo “N” fue trasladado al Reclusorio Preventivo Varonil Oriente en la Ciudad de México, mientras que Humberta “N” fue ingresada al Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla.
Ambos individuos han sido puestos a disposición del juez de control correspondiente, quien determinará su situación jurídica durante la audiencia inicial. El delito de explotación laboral de menores está catalogado en la legislación penal como una grave violación a los derechos humanos, y las penas para este crimen pueden superar los 20 años de prisión si se comprueban agravantes como el uso de violencia, la reincidencia o la pluralidad de víctimas.
