Estados Unidos ha tomado una postura firme en la defensa de sus intereses económicos. Donald Trump, con una política de mano dura, ha impuesto aranceles del 25% a productos mexicanos, buscando fortalecer su país sin importar el impacto que esto tenga en su principal socio comercial. Mientras tanto, en México la incertidumbre crece. ¿Cómo afectará esta medida a los consumidores y empresarios? Más importante aún, ¿qué está haciendo el gobierno mexicano para responder a este golpe económico?
La realidad es que México tiene opciones, pero para que funcionen, deben aplicarse con inteligencia y estrategia.
La clave está en la inversión: Atraer capital y generar empleos
Si Estados Unidos cierra sus puertas con altos impuestos a las importaciones, México debe abrir nuevas rutas de comercio y fortalecer su atractivo para la inversión extranjera.
Nuestro país tiene ventajas estratégicas como su ubicación geográfica y una mano de obra altamente competitiva. Sin embargo, estas fortalezas pierden valor cuando la inseguridad y la incertidumbre jurídica desalientan la llegada de nuevas empresas.
- Muchas compañías han optado por instalarse en Asia en lugar de México debido a problemas como la extorsión y los robos.
- La falta de un estado de derecho claro hace que los inversionistas duden en poner su dinero aquí.
- Sin seguridad, las empresas simplemente no apostarán por el país.
Si México quiere ser un imán para la inversión, debe garantizar que esos recursos estarán protegidos.
Bajar impuestos y administrar mejor los recursos
Otro factor clave es la carga fiscal, pues si exportar se vuelve más caro debido a los aranceles de Trump, mantener impuestos elevados en México solo agrava la situación. Reducir la carga tributaria para las empresas permitiría:
- Mantener precios competitivos en los mercados internacionales.
- Generar más empleos al incentivar el crecimiento de las compañías.
- Evitar que más empresas trasladen sus operaciones a otros países.
Pero bajar impuestos no es suficiente si el gasto público sigue siendo ineficiente. México necesita un manejo más eficiente del dinero público, evitando inversiones en proyectos poco rentables y priorizando infraestructura, seguridad, salud y educación.
Sin seguridad, no hay crecimiento económico
Por más reformas económicas que se hagan, sin un plan real para combatir la violencia y el crimen organizado, cualquier estrategia será insuficiente.
- El narcotráfico y la extorsión afectan a pequeños comerciantes y grandes empresas por igual.
- La falta de control sobre el tráfico de fentanilo da argumentos a Trump para seguir presionando a México.
- Los inversionistas buscan estabilidad y certidumbre antes de decidir dónde colocar su capital.
Si México no logra frenar la creciente inseguridad, las inversiones seguirán huyendo y la economía se estancará.
México necesita reglas claras y una estrategia real
Ante el reto que representan los impuestos de Trump y la falta de seguridad interna, México necesita con urgencia:
- Un plan de inversión que ofrezca confianza a los empresarios.
- Reducción de impuestos para impulsar la competitividad.
- Administración eficiente de los recursos públicos para fortalecer infraestructura y servicios.
- Una estrategia integral contra el crimen organizado, que garantice la seguridad de ciudadanos y empresas.
El verdadero problema no es solo el aumento de los impuestos estadounidenses a las exportaciones mexicanas. El mayor desafío es fortalecer la economía interna y generar estabilidad para que las inversiones lleguen y se mantengan en el país.
Si nuestro Gobierno no toma medidas urgentes, los aranceles de Trump serán solo el inicio de una crisis económica más profunda.