Un fantasma recorre Bolivia: el fantasma de la crisis. Las calles, antes vibrantes y llenas de vida, ahora son escenario de protestas, bloqueos y cacerolazos.
La escasez de combustible, la inflación galopante y la falta de dólares han sumido al país en un profundo malestar social, poniendo en jaque al gobierno de Luis Arce.
Pero la crisis económica no es el único frente que enfrenta el país: la pugna política entre el expresidente y acusado de abuso y trata de menores Evo Morales y el actual mandatario, Luis Arce, añade leña al fuego y amenaza con desestabilizar aún más la nación.
Las consecuencias de la escasez de combustibles en Bolivia se están dejando sentir: los alimentos se han encarecido y no hay suficientes dólares. ¿Por qué ha llegado a esta situación el país andino? https://t.co/cvBL9qKTBA
— Voz de América (@VozdeAmerica) November 29, 2024
El grito desesperado: "¡Todo está caro!”
"¡Todo está caro!”, se escucha en cada esquina, en cada mercado, en cada hogar boliviano.
La inflación, que según el Instituto Nacional de Estadística (INE) alcanzó un preocupante 5.3% en septiembre, sin embargo otros datos son los que maneja el Ministerio (Secretaria) de Planificación del Desarrollo, en los 10 meses de 2024, el país reportó una inflación del 7,26% mientras que, para diciembre, se calcula que se ubicará en 7,94 por ciento, inflación que carcome el poder adquisitivo de la gente.
El Estado, sin embargo, había proyectado una cifra considerablemente menor, de3,6% para todo el período en curso. Los precios de los alimentos básicos, como la carne, el pan y la leche, se han disparado, mientras que el costo del transporte público se ha vuelto casi inaccesible para muchos.
La sed de dólares que asfixia al país
La escasez de dólares es otro de los factores que agravan la crisis. Las reservas internacionales del Banco Central de Bolivia (BCB) han caído a su nivel más bajo en 12 años, lo que ha generado una devaluación de la moneda local y ha dificultado las importaciones.
El gobierno ha implementado medidas para controlar la salida de dólares, como la venta directa a la población a través del BCB, pero la demanda sigue superando la oferta.
Crisis y descontento desatan protestas sociales
La combinación de inflación, escasez de combustible y falta de dólares ha creado un caldo de cultivo para el descontento social.
Las protestas se multiplican en las calles, lideradas por organizaciones sociales, sindicatos y grupos de oposición. Los bloqueos de carreteras se han convertido en una constante, afectando el transporte y el comercio.
¿Qué es el "anillazo"? Organizaciones cívicas convocan a una protesta en Bolivia por crisis económica https://t.co/FIbRpQ21aA
— CNN en Español (@CNNEE) November 26, 2024
El gobierno de Luis Arce se encuentra entre la espada y la pared. Por un lado, la presión social exige soluciones inmediatas a la crisis.
Por otro lado, las limitaciones económicas y las presiones políticas dificultan la toma de decisiones. Arce ha anunciado un plan de austeridad y ha solicitado créditos internacionales, pero la incertidumbre persiste.
Evo vs. Arce: una lucha de poder que divide al país
La crisis económica se ve agravada por la pugna política entre Evo Morales, ex líder del partido gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), y el presidente Luis Arce.
Morales, quien renunció a la presidencia en 2019 tras irregularidades notorias y denuncias contundentes de fraude en las elecciones presidenciales, ha acusado a Arce de “traicionar” el proceso de cambio y de implementar políticas neoliberales.
A nueve meses de las elecciones presidenciales en Bolivia, polémicos fallos judiciales avivan la disputa por el liderazgo en el partido oficialista, mientras surgen varias alternativas opositoras al gobierno de izquierda.
— Voz de América (@VozdeAmerica) November 19, 2024
📹: @fabiolachambi, corresponsal de la Voz de América pic.twitter.com/taxIwIpotS
La sombra de la desestabilización
La lucha de poder entre Evo y Arce ha generado divisiones dentro del MAS y ha debilitado al gobierno.
Morales ha convocado a movilizaciones y bloqueos en apoyo a sus demandas, lo que ha aumentado la tensión social y ha generado temores de desestabilización. Algunos analistas advierten que la crisis política podría derivar en un golpe de estado o en una intervención extranjera.
En Cochabamba, Bolivia, se presentó un bloqueo de carreteras por parte de manifestantes que intentaban impedir el posible arresto del ex presidente boliviano Evo Morales, quien esta bajo investigación por presunto abuso de un menor durante su mandato. 🔗: https://t.co/jkON523VgX pic.twitter.com/lx8ge2GhEN
— Voz de América (@VozdeAmerica) October 26, 2024
Elecciones 2025: ¿un nuevo horizonte o más de lo mismo?
En medio de este panorama convulso, las elecciones generales de 2025 se vislumbran como un punto de inflexión para Bolivia . La población, agobiada por la crisis y desilusionada con la clase política, busca alternativas que ofrezcan soluciones reales a sus problemas.
Sin embargo, el panorama electoral es incierto. El MAS, dividido entre los seguidores de Evo y Arce, podría perder la hegemonía que ha mantenido durante casi dos décadas.
La oposición, fragmentada y sin un liderazgo claro, busca capitalizar el descontento social, pero enfrenta el desafío de construir una alternativa creíble y convincente.
Las elecciones de 2025 serán una prueba de fuego para la democracia boliviana. La población tendrá la oportunidad de decidir el rumbo del país en un momento crucial de su historia.