Bayern Munich podría conseguir su décimo título de la Bundesliga de manera consecutiva este sábado cuando enfrenten a su más grande rival, el Borussia Dortmund. Ese es el objetivo del conjunto dirigido por Julian Nagelsmann para levantar el trofeo en su propia casa, el estadio Allianz Arena, con sus aficinoados en las gradas.
Queremos ganar el título la semana que viene contra el Dortmund en casa. Es un partido especial para nosotros y para toda la Bundesliga. Ese es el objetivo final, conseguir el campeonato.”, dijo Joshua Kimmich después de conseguir la victoria ante el Arminia Bielefeld, que ya los coloca a un solo paso del campeonato germano.
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En este momento, el Bayern es líder con 73 puntos, cosecha de 23 victorias, tres empates y cuatro derrotas. Mientras que el conjunto amarillo cuenta con 63 unidades, por lo que el partido de la jornada 31 entre estas dos potencias alemanas podría definir al campeón de la Bundesliga.
No todo es alegría en el Bayern Munich
A pesar de las buenas noticias en el futbol alemán, como esa misma última victoria ante el Arminia, los últimos días han sido agridulces, ya que todavía pesa la eliminación de la UEFA Champions League, ante un equipo que se pensaba que era de los más débiles en la fase de cuartos de final del torneo.
“"Hoy ha sido una liberación de la frustración generada después de la eliminación en la Champions League” señaló Serge Gnabry, mediocampista del Munich.
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La rivalidad entre estos dos equipos se ha caracterizado por peleas de títulos. En el futbol germano constantemente son primer y segundo lugar de la clasificación final. También ya disputaron el partido decisivo de la Champions League en el 2013. Sin embargo, la hegemonía es para el Munich. En los últimos 22 partidos de ambos, son 14 victorias para el Bayern (incluida la de UCL), tres empates y solo 5 triunfos del Dortmund.
“Fue una victoria merecida e importante para nosotros por tener este matchball en casa contra el Dortmund. Es una bonita coincidencia que no ocurre tan a menudo. Nos hace mucha ilusión.”, aseguró el director técnico, Nagelsmann.
